Gente que piensa (en mí)

martes, 29 de enero de 2013

"Anastasio no oyó más. Ella siguió hablando, pero él no la oyó. No sabía que la tristeza pudiera producir dolor físico, que el estupor pudiera secar la garganta, secándola sin habla. No sabía, en fin, que se pudiera sufrir tanto, tan hondo, tan desde lejos, tan desde dentro de uno mismo."

-Edad Prohibida-

No hay comentarios:

Publicar un comentario