Así que para suplir mi falta de inspiración y para dejaros algo especial, os voy a enseñar uno de los textos que más me gustan. Lo escribí en un momento muy especial, la primera vez que dormí -sí, dormí- con la única persona a la que realmente he amado. Espero que os guste, porque es una parte muy íntima y personal de mi vida.
Me podría pasar horas aquí, enredada entre tus brazos como si no hubiera mañana, como si esa alarma que está a punto de sonar no te fuera a despertar jamás. Podría mirarte durante años, podría acompasar mi respiración al ritmo de la tuya durante milenios y no pasaría nada, porque tú no te enterarías, seguirías dormido sin darte cuenta de que mi corazón está a punto de estallar. Podría acercarme más a ti pero eso ya lo haces tú. Mientras susurras algo en sueños te mueves y me abrazas más fuerte, como si no quisieras que me fuese. Pero, ¿a dónde voy a ir? ¿Dónde voy a estar mejor que entre tus brazos? ¿Qué aroma mejor que el de tu pelo y que mejor sonrisa que la que forma tu pequeña boca?
Y sé que es de ilusos pensar que esto se alargará eternamente porque sé que te irás, como haces siempre. Terminarás desapareciendo, solo me dejarás este recuerdo. Pero también sería de tontos no aprovecharlo mientras dure, no disfrutar de este momento. Así que acércate un poco más, sí, así. Quédate aquí que quiero soñar contigo, quédate aquí que no quiero pasar más frío.
P.D: Os dejaré otra sorpresa, pero tiempo al tiempo :) ¡Buenas vacaciones amores!
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